Señor Jesús,
confieso que he cometido errores
en la administración de mis finanzas.
Atravieso por momentos muy difíciles para mi
en las cuestiones laborales y económicas,
he acumulado demasiadas deudas,
y ahora no puedo imaginar
como resolver estos problemas sin Tu ayuda.
Por favor, Señor,
te ruego que extiendas tus manos sobre mí,
para que mis acreedores
tengan paciencia y benevolencia conmigo.
Inspírame para que yo pueda saber
cuales son los medios adecuados
para generar ingresos
y resolver los problemas que me oprimen
para poder respirar de nuevo.
Ábreme los caminos
y proporcióname la ayuda necesaria
para cancelar todas mis deudas
y conseguir el sustento diario
para mí y los míos.
Por favor, perdona mis pecados, Señor
ya he aprendido que no debo derrochar
ni comprometerme con pagos
sin tener la seguridad
de poder hacerles frente.
Camina conmigo y ayúdame
a tomar las decisiones correctas
en todos los aspectos de mi vida.
En tu nombre te lo pido,
pues Tu eres magnánimo y benevolente
con las ovejas que formamos tu rebaño.
Jesús, tu eres el Buen Pastor,
que vela día a día
por el bienestar de sus ovejas,
escucha mi súplica
y no me dejes abandonado.
Amen
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