Oh San José Moscati,
médico de gran corazón,
que en el ejercicio de tu profesión
curabas el cuerpo y el espíritu de tus pacientes,
míranos que recurrimos con fe a tu intercesión.
Danos la salud física y espiritual,
para que podamos servir
con generosidad a los hermanos.
Alivia las penas de los que sufren,
conforta a los enfermos,
consuela a los afligidos,
consuela a los afligidos,
da esperanza a los que no tienen fe.
Haz que los enfermos
puedan encontrar médicos como tú,
un modelo de vida,
los trabajadores un ejemplo,
los ancianos un consuelo,
los moribundos la esperanza
de la salvación eterna.
Sé un guía para nosotros:
enséñanos a trabajar con seriedad,
honestidad y caridad,
para cumplir cristianamente
nuestros deberes cotidianos.
¡San José Moscati,
ruega por nosotros!
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